Cuando pensamos en un Ferrari no nos imaginamos precisamente un coche barato, pero seguro que tampoco adivináis el precio del más caro del mundo. ¿Y si os decimos que todo el dinero que se ha desembolsado por él irá directo a una muy buena causa? Se trata del ya de por sí único y exclusivo Ferrari LaFerrari, del que sólo se iban a fabricar 499 unidades. Pero la firma decidió hacer una más, la número 500, con la finalidad de ser subastada.
El LaFerrari 500 tiene un acabado muy especial: es completamente rojo y dos líneas blancas atraviesan su capó hasta llegar al morro, decorado con la bandera italiana. Y es que el sentimiento nacional está muy presente en esta pieza, ya que su objetivo era que el dinero que se consiguiera con su venta fuera destinado a ayudar a las víctimas del terremoto que tuvo lugar en el centro de Italia el pasado 24 de agosto. Y así se hizo: se subastó por la empresa con gran experiencia en pujas relacionadas con el mundo del motor RM Shoteby’s, en las Finales Mundiales Ferrari disputadas en el circuito de Daytona.
De esta forma, la firma de Maranello aumentó la exclusiva producción del Ferrari LaFerrari a una más, de las 499 unidades que se anunciaron en un principio. El número 500 ha alcanzado un precio récord: 7 millones de dólares, unos 6’5 millones de euros, convirtiéndose así en uno de los coches más caro de este siglo.
El comprador se lleva a casa probablemente el superdeportivo híbrido más exclusivo en la actualidad, con un motor de combustión V12 de 800 caballos que, sumado a los 163 que ofrece el eléctrico, puede llegar a alcanzar los 963CV de potencia y 900NM de par motor. Será probablemente el dinero mejor invertido de su vida y todo con una finalidad solidaria.
