La reprogramación de coches diésel se suele hacer con el objetivo de reducir el consumo de combustible. En alguna ocasión os hemos hablado del “ecotuning” que consiste en conseguir un aumento del par motor en bajas y medias revoluciones y así conseguir una mayor eficiencia en la conducción. Este tipo de reprogramación es efectiva sobretodo en coches sobrealimentados.
Aunque son muchos los que querrían subir otro nivel de su coche diésel. En el caso de los motores gasolina existen muchas posibilidades para mejorar las prestaciones y la eficiencia del motor. No corren la misma suerte los motores diésel.
A menudo recibimos clientes queriendo realizar una stage 2 en sus coches diésel. Pero ello implica una serie de riesgos. Una stage 2 conlleva una modificación de la ECU, pero también modificaciones mecánicas. Además, en el caso de un vehículo diésel implica la eliminación del filtro de partículas del escape. Teniendo en cuenta que eliminar el filtro de partículas no es legal para uso en carreteras de la Unión Europea, la stage 2 en un vehículo de gasóleo únicamente sería factible para uso en circuito.
En el caso de una stage 1 que únicamente implica una modificación electrónica de la ECU no repercute en la emisión de gases. Las reprogramaciones que se realizan en Car-tec respetan todos los parámetros de seguridad y fiabilidad de los vehículos.
En definitiva, si has reprogramado o estás pensando en reprogramar tu coche debes saber que no existe ningún problema a la hora de pasar la ITV. Además, nuestras potenciaciones mejoran el rendimiento del vehículo, e incluso, en algunos casos, el consumo de combustible se sitúa en su rango más óptimo, así como las emisiones de CO2. En ningún caso estos valores aumentan, puesto que siempre buscamos la mayor eficiencia y optimización del motor.
