El T-Cross es la nueva criatura de Volkswagen y el pasado jueves tuvo lugar su presentación mundial. El lanzamiento de este nuevo SUV es posiblemente uno de los más importantes de los últimos años para la marca alemana. Un nuevo crossover urbano que se presenta como un vehículo ideal para el día a día.
De su diseño desenfadado destacan el faldón delantero y la parrilla frontal, así como unos faros que le otorgan una imponente expresión. Un vehículo con formas SUV sobre la base de un Volkswagen Polo. Y además guarda muchas similitudes con su primo hermano Seat Arona.
Pero vayamos al “quid” de la cuestión, ¿qué motores montará? Por el momento habrá tres motores disponibles, dos de gasolina y uno diésel. La motorización gasolina será 1.0 TSI turbo de tres cilindros en dos versiones, uno de 95 CV y otro de 115CV. Y por parte del diésel, un cuatro cilindros 1.6 TDI con 95 CV.
Como podéis ver, vuelven a ser motores sobrealimentados y capados electrónicamente. Tal y como os contamos en un post anterior, es algo muy común. Un mismo motor, diferentes entregas de potencia y diferentes precios.
T-Cross: ¿cómo quedaría reprogramado?
En el caso de los motores 1.0 TSI, que ha montado hasta el momento la marca alemana, con una reprogramación de motor hemos conseguido un aumento en potencia bastante significativo. Sobretodo en par motor, ese empujón que les suele faltar a estos motores.
Por el momento no sabemos qué código de motor será, ni qué unidad incorporará hasta que se empiecen a producir. Desde Car-tec hacemos un llamamiento a todos aquellos que tengan en mente adquirir un T-Cross y les invitamos a pasar por nuestras instalaciones para poder estudiar la unidad de motor y poder realizar una reprogramación a medida.
Por ahora sólo nos queda esperar hasta mayo del 2019 que será cuando empezaremos a ver las primeras unidades del T-Cross por las calles. Y hasta entonces Car-tec estudiará su posible reprogramación para poder ofrecer unos datos más concretos.
