10 December 2020
8 Minutos
La downpipe es un elemento esencial para optimizar el rendimiento de un vehículo y nos beneficia de varias maneras. Pero vamos a empezar desde el principio.
El escape de los coches turboalimentados se compone de 3 partes principales. Por un lado, en la parte más cercana al motor, concretamente a la salida del turbo, tenemos la downpipe. Lo siguiente que nos encontramos son los silenciosos, que van a amortiguar el sonido para que este cumpla con normativa. De silenciosos hay dos, el intermedio y el trasero.
Centrándonos en la downpipe, dentro encontramos lo que llamamos el catalizador, que es una parte muy importante de la downpipe. El catalizador es un componente que sirve para el control y reducción de los gases nocivos expulsados por el motor. En la actualidad, es la manera más usada para frenar las emisiones contaminantes en los automóviles.
Lo que todo el mundo sabe es que cambiando la downpipe por una deportiva, el flujo de gas de escape se mejora, es decir, tenemos capacidad de evacuar más gases del motor. Aunque lo que mucha gente no tiene en cuenta es que, al evacuar más gases también evacuamos más calor.
La temperatura de escape es esencial para lo que es un rendimiento estable de motor, es decir, para que un motor dure. Si podemos evacuar más calor, podemos llenar más el cilindro, si llenamos más el cilindro tenemos más rendimiento.
En resumen, con una downpipe deportiva conseguimos:
Llevan catalizador pero no todas cumplen con normativa de gases.
Los catalizadores actuales de serie suelen ser cerámicos, y suelen llevar entre 400-600 celdas para cumplir con emisiones. Es decir, son muy restrictivos en cuanto a flujo de gases. Por lo tanto, cuando buscas rendimiento, solemos buscar catalizadores con menos celdas y de un mejor material: los catalizadores metálicos.
Los catalizadores metálicos, en contraposición a los de cerámica, presentan varias mejoras: mejor conductibilidad térmica, menor tiempo de calentamiento, menos espesor de las paredes del substrato, capacidad catalítica superior, menores dimensiones a igualdad de eficacia, mayor resistencia a los golpes. Os preguntaréis después de leer todo esto, por qué las marcas usan catalizadores cerámicos. La respuesta es sencilla: el coste es menor.
Si buscamos un poco en el mercado, observamos que encontraremos numerosas downpipes con catalizadores de 100 celdas a un coste asequible. Estas downpipes cumplen con normativa EURO2, normativa de los años 90, son catalizadores obsoletos que todavía se venden. Por lo tanto, si buscas un catalizador que te dé rendimiento y cumplir con normativas, deberías elegir un catalizador metálico de 200 celdas. Éstas ya cumplen con las normativas actuales y está comprobado que tienen un flujo de gases muy bueno.
Se trata de downpipes enfocadas al mundo deportivo del motor. Cualquier vehículo que lleve este tipo de downpipe, no cumplirá con la normativa de emisiones de ITV. Si bien es una opción mucho más económica, pues eliminamos el elemento más caro de la misma, hay que tener en cuenta que será necesario volver a cambiarla antes de ITV. La eficiencia en cuanto a disipación de calor de estas downpipes es muy alta. Al no tener catalizador, el flujo de aire es mucho más directo y refrigeraremos más rápido.
Según el cubicaje de un motor está estudiado que ciertos diámetros van mejor o peor. También depende del uso que le vayas a dar al vehículo. Por ejemplo, a más rendimiento, más gases de escape vamos a generar y necesitaríamos trabajar a un diámetro superior.
También es importante evitar incongruencias como montar una downpipe de un diámetro mayor y, luego, tener un escape original o restrictivo. Todo lo que ganarías con la downpipe, luego lo volverías a perder con ese escape. Obtendrías lo que llamamos ‘el efecto cuello de botella’ y para evitar esto debemos hacer que todo cuadre de inicio a fin, que todo el conjunto motor vaya acorde.
En la mayoría de las veces, sí. Te explicamos el porqué.
El coche tiene un sistema post-catalítico, es decir, un sistema que controla el estado del catalizador. Naturalmente, según el catalizador, la sensibilidad del vehículo y en cómo esté configurado, puede saltar dicho fallo (el P0420). Si esto pasa, quiere decir que según el criterio de la unidad de motor la eficiencia catalítica es baja (que no quiere decir que esté contaminando más o menos). En este caso, es necesario reprogramar para inhibir (reconfigurar) el diagnóstico de catalizador.
Por otro lado, ya que cambiando la downpipe consigues bajar la temperatura de escape estimada del fabricante (conseguimos bajar hasta 70ºC), nosotros siempre recomendamos aprovecharlo y darle ese toque extra al motor con una reprogramación de centralita stage 2. Así siempre conseguiremos mejorar esa carga motor y optimizar el rendimiento de todo el conjunto.
Si a un coche se le cambia la downpipe por una catalizada homologada de calidad, en principio no haría falta reprogramar. Si el catalizador es bueno y homologado no deberían saltar los fallos y habría una mejora notable en el coche.
Lo mejor para elegir una buena downpipe para tu coche es dejarte recomendar por un especialista y seguir sus indicaciones. En el caso de que quieras hacer un proyecto con unos objetivos muy concretos, es posible que además de una downpipe necesites cambiar más cosas para que todo rinda en armonía. Para eso, mejor dejar aconsejarte.
Si tienes dudas, quieres asesorarte o incluso si ya lo tienes claro y quieres conseguir tu downpipe con nosotros, estamos a tu disposición y te ofrecemos una atención totalmente personalizada a tus necesidades. Porque nosotros consideramos que cada conductor y cada coche es distinto. Puedes contactarnos aquí.
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